Acto primero: En tiempos del rey Don Pedro el Justiciero (1334-1369) en Sevilla es donde se desarrolla esta divertida comedia que trata los enredos de Don Fernando de Godoy, pretendiente de Doña Flor desde hace tres años y por quien una noche mata en duelo a un caballero que intenta alejarlo de la ventana de Flor. Don Fernando huye y se topa con el Marqués quien antes de saber que el muerto era su hermano promete a Fernando ayudarlo y salvarlo del peligro y al enterarse de que éste se encontraba en la ventana de su prometida lo reta, pero Fernando insiste en que el origen de dicha relación es un secreto que prometió guardar a Flor hasta la muerte. El Marqués conmovido por su nobleza lo perdona y le ofrece su amistad.
Acto segundo: Don Pedro de Luna enamorado de Doña Inés de Aragón la visita a escondidas en el palacio real, el rey al enterarse ordena al Marqués su muerte, pero el Marqués ofrece a Don Pedro se vaya a Granada a dirigir las tropas.
Acto tercero: Tras el mal entendido con Doña Flor el Marqués decide terminar su relación y Doña Ana intercede por su amiga. Al escuchar a medias la conversación entre Ana y el Marqués, Don Diego hermano de Doña Flor y enamorado de Ana piensa que ellos mantienen en secreto una relación y decide tomar venganza haciéndose pasar por el Marqués y ayudado por Encinas intenta forzar a Doña Ana en su habitación. La dama segura de el hombre en su habitación era el Marqués, se presenta ante el rey a dar queja y exigir justicia. El Marqués es llevado a prisión y sus enemigos agregan que el mandó matar a su hermano por celos de Flor. Don Pedro de Luna regresa muy agradecido con el Marqués por su triunfo en Granada y le ofrece quedarse preso en su lugar, lo que el Marqués rechaza. Los culpables Don Diego y Don Fernando de Godoy se presentan ante el rey para declarar su daño y presentan a Encinas y a Doña Flor como testigos. El rey contento de la nobleza y valentía de éstos, los perdona a todos. Concede la mano de Doña Inés de Aragón a Don Pedro, Doña Ana se casa con Don Diego y Doña Flor con el Marqués.
De acuerdo con las divisiones tradicionales, vigentes en la época, esta comedia consta de tres actos. En el primero se presentan todos los elementos del problema, que luego de alcanzar su clímax o nudo de la obra en el Segundo acto, se resuelve en el tercero, respondiendo al esquema: presentación, desarrollo, resolución.
Acto primero
Doce escenas.
Doña Flor estando en la calle ve a Don Fernando a quien había conocido tres años atrás en Córdova en donde su relación terminó a causa del hermano de Flor que al encontrarlos platicando los separó, así Doña Flor quien ahora se encontraba comprometida con el Marqués se mudó a Sevilla con Don Diego su hermano. Doña Flor le pide a Don Fernando que no la vuelva a buscar y guarde el secreto lo sucedido en Córdova.
Una noche el Marqués, caminando con Ricardo se topan a Don Fernando que sin saber de quiénes se trataban le pide ayuda al Marqués ya que en duelo Don Fernando, dio muerte a un hombre. Al alcanzar el juez al Marqués para cuestionarlo, éste se entera que el hombre muerto era su hermano y de que el pleito se suscitó en la ventana de Doña Flor; aun así decide ayudar al presunto responsable a quien ya había dado su palabra. Don Diego, hermano de Flor, al enterarse, al enterarse de lo sucedido le exige a su hermana una explicación, pero Flor niega saber de quién se trataba el hombre que llegó a su ventana y dio muerte a Sancho. Ya solos el Marqués y Don Fernando, éste ultimo se niega a contarle al Marqués el motivo de su presencia en la ventana de Doña Flor por tratarse de una promesa de honor con ella, lo que el Marqués finalmente reconoce como una nobleza y valentía y lo perdona ofreciéndole su fiel amistad.
Acto segundo
Quince escenas.
El Marqués intercede ante el Rey por el agresor de su hermano, a quien el Rey, reconociendo el valor del Marqués perdona. El Rey le confiesa al Marqués su enojo al enterarse de que Don Pedro de Luna visita a una dama todas las noches en el palacio real sin su consentimiento por lo que le pide al Marqués que lo mate lo que el Marqués rechaza argumentando que no se puede castigar así yerros causados por amor. Don Diego va a hablar con el Marqués para pedirle perdón por lo que su hermana Flor causó, el Marqués le responde aceptando la disculpa y ofreciendo su amistad a Don Diego. Encinas, ex criado de Don Fernando, y ahora de Don Diego se pregunta qué habrá sido de su señor y de su suerte, en eso aparece Don Fernando vestido de peregrino pidiéndole al fiel Encinas le cuente lo que ha pasado en su ausencia. Encinas así lo hace, y ayuda a Don Fernando a entrar a la casa de doña Flor para hablar con ella. Don Fernando se muestra muy enojado con Flor porque ésta, nunca le dijo que estuviera comprometida y la acusa por lo que pasó en su ventana.
En casa de Doña Ana se encuentran ella y el Marqués platicando de Flor y de la decepción que él sufrió respecto a ella. El Marqués comenta sus intenciones de casarse ahora con doña Inés de Aragón, pero Doña Ana insiste en que debe perdonar a su amiga Doña Flor. En esas están cuando en un mal entendido de Don Diego quien se encuentra escuchando la conversación, supone que existe ya un romance entre Doña Ana y el Marqués. Enojado y tramando una venganza le pide a Encinas que les haga entender a Doña Ana e Inés que él –Encinas- es ahora sirviente del Marqués y así lo hace. El Marqués manda llamar a Don Pedro de Luna para avisarle que debido a la muerte del general Don Miguel Carabeo quien se encontraba al frente de las tropas en Granada. El Marqués le propone a Don Diego que él se vaya y así salvarlo de la muerte que el rey quiere para él a lo que Don Pedro se niega porque supone que el Marqués se quiere librar de él para casarse con Doña Inés de Aragón y tener un puesto más cercano al rey, finalmente Don Pedro tiene que aceptar la orden del Marqués y se marcha.
Acto tercero
Veintidós escenas.
Don Diego en venganza por lo que creyó entender de la relación entre el Marqués y Doña Ana, decide entrar una noche a la habitación de Ana haciéndose pasar por el Marqués y ayudado por un criado de ella a quien sobornan. El Marqués le confiesa al rey que mandó a Granada a Don Pedro de Luna, en lugar de matarlo como el rey lo había pedido. El rey lo disculpa y nombra al Marqués su mayordomo mayor. Se fortalecen los lazos de amistad entre ambos. En esas andan cuando llega Doña Ana a exigirle al rey justicia por lo que le sucedió y le cuenta de como el Marqués entró en su habitación y pretendió forzarla: Al fin, su fuerza mucha, débil mi cuerpo, mi defensa poca, en la prolija lucha al pecho aliento y voces a la boca negaron: lo demás, si es bien contarlo, la vergüenza lo dice con callarlo.
El rey manda encarcelar al Marqués. Don Diego le expresa a Encinas su agradecimiento por haberlo ayudado a entrar a casa de Doña Ana. Un pregonero anuncia que el rey promete dos mil ducados a quien entregue preso a Juan de Encinas –que se supone es criado del Marqués- y a él mismo si se presenta se le perdonarán todos sus delitos. Inés y Fernando lo ven pero Encinas niega conocerlos. Don Pedro de Luna regresa triunfante de Granada por haber derrotado a los africanos y se presenta ante el rey para darles los pormenores del acontecimiento. El rey le da a Diego la mano de Doña Inés de Aragón.
Don Fernando se siente comprometido con el Marqués que le salvo la vida y quiere corresponderle de la misma manera, así que va con Flor a pedirle permiso para contra el secreto de su relación en Córdova y les pide a Diego y Encinas declaren la verdad de lo sucedido con Doña Ana. Don Pedro que también se siente muy agradecido con el Marqués por lo que hizo por él le pide al rey dejarlo a él en prisión y liberar al Marqués, lo que el Marqués rechaza rotundamente. Ante el rey se presentan Don Fernando, Don Diego y Doña Flor a confesar la injusticia contra en Marqués. Doña Ana y el rey aceptan la explicación. Aparece Encinas a declarar que todo fue planeado por Don Diego y que él se hizo pasar por criado del Marqués ante Doña Ana. El rey Pedro el Justiciero se siente orgulloso por la valentía de los presentes y decide perdonarlos a todos, dando la mano de Doña Inés de Aragón a Don Pedro, de Doña Ana a Don Diego y de Doña Flor al Marqués Don Fadrique.
Personajes principales
El Marqués Don Fadrique: Hombre noble y bondadoso que perdona al agresor de su hermano y a Don Pedro de Luna intercediendo por ellos ante el rey. Enamorado de Doña Flor y gente de la privanza del rey Pedro el Justiciero.
Don Fernando de Godoy: Natural de Córdova donde conoció y pretendió a Doña Flor. Mata en duelo a Don Sancho, hermano del Marqués. Se convierte en amigo del Marqués que le salvó la vida y en agradecimiento lo salva de la cárcel.
Don Diego: Hermano de Flor y pretendiente de Doña Ana. Busca el matrimonio de su hermana con el Marqués y así ganar un mejor puesto en la corte.
Don Pedro de Luna: Enamorado de Doña Inés de Aragón, ambicioso de la privanza del rey . Triunfa en Granada al frente de las tropas del rey y regresa a Sevilla agradecido con el Marqués que lo salvó de la muerte.
El Rey Don Pedro el Justiciero: Como su mote lo dice es un hombre sencillo y justo. Amigo del Marqués a quien tiene por hombre de su entera confianza.
Encinas: Criado y amigo fiel de Don Fernando que al creer a su señor desaparecido ofrece sus servicios a Don Diego, cumpliendo con la misma fidelidad. Es el gracioso de la obra.
Doña Flor: No niega su pasado con Don Fernando pero se presenta fiel al cariño del Marqués con quien finalmente se casa.
Doña Ana: Sencilla y buena amiga de Flor por quien intercede ante el Marqués. Es un modelo de lealtad femenina.
La fidelidad y la justicia.
Personajes secundarios
Inés: Criada.
Ricardo: Criado.
Un secretario, un juez, un corchete, un escudero, un pregonero, guardias, soldados y corchetes.